El principal fármaco utilizado en el tratamiento de la anemia es el hierro, y el contenido de fósforo de la leche es relativamente grande, lo que afectará la absorción de hierro por parte del cuerpo humano, por lo que no es adecuado para beber leche en el tratamiento de la anemia.
Se mejorará la dificultad de digestión de los alimentos fritos, aumentará la carga del tracto gastrointestinal, por lo que los pacientes con anemia deben comer la menor cantidad posible de alimentos fritos.